Introducción

La pandemia del COVID-19 ha puesto a prueba la capacidad emocional y mental de las personas en todo el mundo. La incertidumbre del futuro y la preocupación por la salud propia y de los seres queridos han generado un estrés emocional sin precedentes. Es importante, en estos momentos, mantener un equilibrio emocional para afrontar la situación de manera efectiva.

El papel de las creencias personales

Cada persona tiene distintas creencias que le permiten afrontar situaciones difíciles. En momentos de crisis, estas creencias tienen un papel esencial en nuestro equilibrio emocional. Las creencias pueden venir de la religión o espiritualidad, de la filosofía personal o de la experiencia previa ante situaciones similares. Para muchas personas, la fe en un ser superior les ayuda a encontrar un propósito en la vida, a aceptar la muerte de seres queridos y a tener esperanza en el futuro. La meditación y la conexión con la naturaleza pueden ayudar a otros a sentir paz y tranquilidad. Lo importante es encontrar aquello que te da fuerza y te permite mantener tu equilibrio emocional.

La importancia de la auto-observación

El primer paso para mantener un equilibrio emocional en tiempos de crisis es la auto-observación. Es importante estar consciente de nuestras emociones y pensamientos, para poder entender su origen y cómo nos afectan. La auto-observación nos permite reconocer cuando estamos cayendo en un espiral de ansiedad, estrés o tristeza y tomar medidas para recuperar el equilibrio.

Pautas para la auto-observación

• Tomarse unos minutos cada día para reflexionar sobre las emociones y pensamientos del día.
• Preguntarse por qué hemos tenido esas emociones y pensamientos.
• Identificar aquellos patrones negativos que nos afectan.
• Reconocer las situaciones que nos hacen sentir más ansiosos, estresados o tristes.

El poder de la empatía

En momentos de crisis, la empatía con los demás es esencial para mantener nuestro equilibrio emocional. La empatía nos ayuda a conectarnos con las emociones de otros y a sentirnos menos solos en la situación. Asimismo, la empatía nos permite ayudar a los demás, lo que genera una satisfacción emocional y puede reducir nuestra propia ansiedad.

Pautas para conectar con la empatía

• Ponernos en el lugar de los demás y tratar de sentir lo que sienten.
• Prestar atención a las necesidades emocionales de los demás.
• Ayudar dentro de nuestras posibilidades, ya sea con palabras o acciones.
• Buscar espacios donde escuchar las experiencias de otras personas y sentirnos parte de una comunidad.

La importancia de cuidar del cuerpo

El equilibrio emocional no solo depende de los pensamientos y emociones, también del estado físico del cuerpo. Cuidar la alimentación, hacer ejercicio, descansar bien y evitar el consumo de drogas o alcohol son esenciales para mantener nuestro cuerpo sano. El cuidado del cuerpo tiene un efecto positivo en nuestro estado de ánimo. Ejercicio, por ejemplo, libera endorfinas, que son especialmente útiles para reducir la ansiedad y el estrés. Cuidar nuestra alimentación y evita drogas o el alcohol permite tener un cuerpo energético para afrontar la situación y mantener un equilibrio emocional.

Pautas para cuidar del cuerpo

• Realizar actividad física que se adapte a tus posibilidades.
• Comer alimentos que potencien la energía del cuerpo, evitando el consumo de alimentos con alto contenido en grasa, sal y azúcares refinados.
• No abusar del alcohol o drogas, ya que perjudican tanto el cuerpo como la mente.
• Darle al cuerpo el descanso y el tiempo libre necesario para poder realizar actividades que enriquezcan el espíritu, como leer o realizar labores creativas.

Conclusiones

Mantener el equilibrio emocional en tiempos de crisis es esencial para afrontar las situaciones difíciles. Las creencias personales, la auto-observación, la empatía y el cuidado del cuerpo son los pilares fundamentales para conseguirlo. Practicar estos hábitos diariamente implica seguramente adquirir también otros que te permitirán tener una vida más emocionalmente equilibrada. El equilibrio emocional contribuye a mantener la salud mental y física.